Déjame que te cuente que hay niños y adolescentes que no pueden vivir con sus padres biológicos. Porque, por el motivo que sea, no son capaces de atenderlos. Y pasan entonces a convivir con sus abuelos, sus tíos o incluso personas ajenas a su familia que deciden acogerlos en su hogar para ofrecerles una vida mejor. Déjame también que te diga que el acogimiento y la adopción son diferentes…
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